El descanso en el hogar, no siempre es sencillo de conseguir. No se trata de conseguir un buen colchón o sofá, aunque se lo principal.
Y no es que digamos que eso de tener una buena cama de calidad, o un sofá cómodo no sea importante, de echo es lo que más. Si no que para conseguir un buen descanso en el hogar se ha de considerar también otras características.
Con esas características, nos referimos a un hogar cómodo, fácil de limpiar. Sin muebles de por medio e inútiles. Exceso de lámparas o decoración.
En fin, cosas que nos ayudarían a no tener más de un quebradero de cabeza a la hora de conseguir un buen descanso en el hogar.
Por que por mucho que nuestra cama sea la mejor del mundo, no estaremos tranquilos viendo todo por medio, o quizás después de haber estado todo el día limpiando por exceso de mobiliario.
Aquí te dejamos unos consejos básicos:
Lo primero de todo, tu colchón
No podremos tener un buen descanso, si no nos levantamos bien desde por la mañana.
Y aquí el papel fundamental lo juega nuestro colchón. Es básico, dormir bien, tranquilo y poder levantarte sin ese molesto dolor de espalda, o con la sensación de no haber dormido nada.
Hay que buscar calidad, y sobre todo adaptabilidad. Ya que ningún cuerpo es igual a otro, tampoco servirá el mismo colchón a todo el mundo. Busca el tuyo, con las características que mejor te vengan.
Sofá, chaise-longue, butaca, lo que mejor se adapte a ti.
Estamos en una época, en la que por trabajo estamos muy poco tiempo en nuestro salón. Por lo que muchas veces, tendemos a prestarle poca atención a nuestro sofá.
Pero es otro de los puntos a considerar para tener el descanso en el hogar perfecto.
De ti y del número de persona que seáis dependerá el tipo que escojas. No importa si es un sofá, chaise longue o butaca. Al igual que el colchón, deberás escoger aquel con el que más cómodo te sientas.
A veces menos es más.
Y es en este punto donde nos referíamos a que no todo es nuestro colchón o sofá. Para conseguir el descanso perfecto, primero debemos tener un hogar cómodo.
La tendencia nos ha hecho ver que no se necesitan una infinidad de muebles en nuestro salón o dormitorio.
Por lo que se utiliza cada vez menos muebles para amueblarlos, muebles simples, sin recovecos ni formas difíciles de limpiar. El estilo minimalista que lo llaman.
Esto, nos dará facilidad y ligereza a la hora de limpiar. A la misma vez, que evitará esa necesidad humana de guardar cosas inútiles que hace que lo tengamos todo patas arriba.
La sensación de tenerlo todo más recogido, nos dará esa paz interior que necesitamos.
En dekogar, sabemos que cada cual tiene su propio estilo, por lo que estos consejos son solo un principio de la odisea de amueblar.
